Las mujeres y sus voces -nuestras voces-
son movimiento.
Somos montañas poderosas, somos esa
historia en constante evolución que nos
reúne y nos integra. Somos universos
autónomos que están conectados,
siempre.
Las mujeres y sus voces, -nuestras voces-
hacen eco para llegar más lejos.